miércoles, 19 de junio de 2013

Ilustración, escena de la escalera

Esta es una de las ilustraciones de la maqueta que hice como un proyecto para clase a principios de 2011
Tamaño A4, Técnica: Tinta china, y lapiz de color.


sábado, 8 de junio de 2013

02

       Miró la luna y esperó caer. No cayó. Desvió la vista a su lado izquierdo hasta
descubrir a la niña de rodillas mirando por la ventana y temblando. Cogió la capa del
extremo y con ella cubrió a Sara por detrás. Luego, con la mano, la empujó del hombro
de manera que la chiquilla quedó tumbada en su pierna y tapada hasta el cuello por la
negra capa.

   -Estás frío. –dijo la niña algo más tranquila. - Ahora que lo pienso… eres como
la noche. Vistes con una gran capa negra como el cielo nocturno, tu pelo es plateado
como la luna, tu coleta parece una estrella fugaz. Aunque te pueda ver estás lejos y frío.
Pero tus ojos…

Los dos se miraron al mismo tiempo a los ojos. Ella tenía una mirada tierna y cálida. Él,
en cambio, parecía que pudiera congelarte en cualquier momento. Aún así, sus ojos no
encajaban para nada con todo él.
El joven volvió a mirar a la luna.

   -Draker…
   -Dime. – respondió susurrando.
   -Hasta eres silencioso como la noche… ¿Por qué vivimos escondidos y solos?
   -Porque estamos jugando al escondite para mayores.
   -Cuando crezca quiero jugar contigo, ¿me dejarás?
   -Claro.
   -Draker…
   -¿Si?
   -Te quiero.

Y la niña durmió plácida y profundamente. Él se quitó la capa y tumbó a la niña alejada
de su pierna y la dejó bien tapada con la gran capa. Draker se retiró y se apoyó en la
mesa del centro del salón con las manos en los bolsillos del pantalón. La pierna
izquierda, donde Sara había estado, notó que estaba más cálida. Pero rápidamente se
volvió a enfriar como el resto de su cuerpo.

Cada mañana, Sara despertaba y bajaba a ver dormir a Draker.
Esa mañana el sol era muy potente, y el chico tapaba con prisa las ventanas con los plásticos que cubrían los
muebles levantando una gran nube de polvo.

   -Draker ¿Qué haces? ¿qué pasa? Deberías descansar.

El joven agarró a la niña y se cubrieron con la capa debajo de la escalera. Al cabo de
unos minutos la niña empezó a tiritar y Draker a sudar.

   -¿Te han encontrado?
   -Nos han encontrado.
   -¿Quiénes?
   -Los dioses únicos.